martes, 19 de junio de 2007

JESUS DE NAZARET


JESUS DE NAZARET





El Ministerio de Jesucristo




Después de setenta años de cautividad, el Señor permitió que Su pueblo regresara a Israel. Sólo un grupo pequeño regresó, pero ellos así como los judíos en otras partes, todavía vivián bajo la ley de otras naciones...

Quinientos años después, cuando Roma gobernó Israel, dos judíos jóvenes llamados Jose y Maria, descendientes del rey David, planearón casarse. Pero antes que ellos vivieran juntos, Maria fue embarazada a través del poder del Espíritu Santo de Dios.



Entonces un ángel del Señor le aparecío a Jose en un sueño, diciendo, "Jose, no te preocupes por tomar a Maria como tu esposa: El Niño en ella se concibió por el Espíritu Santo. El Niño es el Hijo de Dios. Y cuando ella de nacimiento a este hijo, tu debes nombrarle 'Jesus' que quiere decir El Salvador porque Él salvará a Su pueblo de sus pecados.

Esto pasó como el profeta Isaias había predicho, 'El Señor mismo te dará una señal; Una virgen tendrá a un hijo, y ellos le llamarán Emmanuel que quiere decir Dios con nosotros.'"
Jesús nació en un establo, en una ciudad llamada Belén. Jose y Maria tenían que viajar a la ciudad de Belén para un censo y pagar sus impuestos. En Belén, Maria dio a luz a su hijo primogénito a quien ellos nombraron Jesús. Así, como fué profetizado, Jesús nació en Belén, siendo descendiente del Rey David.

Y en la misma región, habían pastores vigilando sus rebaños por la noche. Y el ángel del Señor vino a ellos, y la gloria del Señor brilló a su alrededor. Y ellos estabán muy asustados. Entonces el ángel dijo, "no tengan miedo, yo traigo buenas noticias de gran alegría, para toda la gente. Hoy nació un Salvador para ustedes qué es Cristo El Señor."
Y el niño creció, poniéndose fuerte en el espíritu; y la gracia de Dios estaba en Él. Jesús maduró, aumentando en sabiduría, en el favor de Dios y hacia la humanidad.





Cuando Jesús tenía aproximadamente treinta años de edad, Juan el Bautista vino, predicando y bautizando en el desierto, diciendo, "Arrepiéntense: Preparanse para El Señor."


Juan era el mensajero que los profetas habían predicho que anunciaría la venida del Salvador. Entonces Jesús vino al río de Jordan para ser bautizado por Juan. Y cuando Juan vio que Jesús venía, dijo, "Miren, este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo."
Y Jesús, cuando fue bautizado, salió del agua, y los cielos se abrieron a Él, y Él vio el Espíritu de Dios descender como una paloma y iluminarlo a Él. Y una voz del cielo dijo, "Éste es mi Hijo amado en quien yo estoy complacido."



Entonces, después que Jesús se pasó cuarenta días en el desierto, Satanás que había tentado a Eva con éxito en el Jardín trato por muchas maneras de tentar a Jesús--pero Jesús no pecaría.


Finalmente, Satanás tomó a Jesús a una montaña muy alta, y le mostró todos los reinos del mundo y su gloria. Entonces Satanás dijo, "Todas estas cosas yo te daré, si tu te caerás y si me rendierás adoración."








Jesús contestó, "Apartate de mí, Satanás: porque Dios ha escrito que 'Tu le rendirás adoración al Señor Tu Dios, y Él sólo debes tu servir.'"

Asi que Jesús, el hijo de Dios, mientras estuvo en la tierra en la forma de un hombre, Él fue tentádo en la misma manera que somos nosotros. Pero, Él nunca pecó.




Así, dónde Adán falló, Jesús tuvo éxito. Esto mostró de hecho que Jesús podría ser El Salvador de la humanidad--Sacrificado como cordero pero enviádo por Dios.










Jesús se reveló de muchas maneras como El Salvador prometido, incluso con milagros innumerables. En una fiesta de bodas, Él transformo el agua en vino. Él sanó a un hombre que había sido invalido por treinta y ocho años.

Jesús curó a un hombre leproso diciéndole, "Sé limpio". E inmediatamente fue curado. Un hombre leproso--un intocable--vio a Jesús y se postró, diciendo, "Señor, si tu quieres, puedes hacerme limpio."


Jesús extendió su mano y lo tocó, diciendo, "Sé limpio". E inmediatamente la lepra lo dejó.
Jesús dio la vista a un hombre que había sido ciego de nacimiento.




Una mujer que por doce años tenía una enfermedad que los doctores no podían sanar, extendió la mano y tocó la túnica de Jesus. Él se volvió, diciendo, "Hija, no te preocupes. Tu fe te ha salvado; ve en paz."
Y los que padecian diferentes enfermedades se los trajeron a Él, y Él los sanó a todos.


Jesús llamó doce hombres, para que lo siguieran. Él les dio el poder y autoridad sobre los diablos, y Él mandó a estos discípulos que predicaran acerca del reino de Dios, y a sanar los enfermos.
Su fama fue por todas partes, y las muchedumbres vinieron a oír lo que enseñaba y a ser sanadas de sus enfermedades.

Cuando una multitud de cinco mil personas necesitó comida, Jesús oró sobre el almuerzo de un joven que tenia pan y peces. La comida fue multiplicada milagrosamente, la multitud comió, y sobrarón doce canastas de comida.
Pero la gente siguio pidiendo más prueba que Jesús era de Dios. Ellos dijeron, "Nuestros antepasados comieron maná en el desierto. Esta escrito en las Escrituras, 'Él les dio pan del cielo para comer.'"



Jesús contestó, "El pan de Dios es Él, quién baja del cielo y le da vida al mundo."
Las personas dijeron, "Señor, danos este pan siempre."

Jesús contestó, "Yo soy el pan de vida: él que viene a mí nunca tendrá hambre; Él que cree en mí nunca tendrá sed." Jesús profetizó que Él sufriría muchas cosas y sería rechazado por los lideres, los principales sacerdotes, y los escribas, y que lo matarían, y resucitaría de la muerte en el tercer día.









domingo, 10 de junio de 2007

JUAN PABLO II





S.S. JUAN PABLO II EL GRANDE

1920 - 2005

"El amor es mas fuerte que la muerte"(Cantar de los Cantares,8)"Su Santidad Juan Pablo II es testigo viviente del amor oblativo y abnegadode los Corazones de Jesús y María" (Madre Adela Gali


Su VidaNació el 18 de mayo de 1920 en Wadowice, sur de Polonia. Su familia estaba conformada por su padre Karol Wojtyla, un militar del ejército austro-húngaro, su madre, Emilia Kaczorowsky, una joven sileciana de origen lituano, y un hermano adolescente de nombre Edmund.
Los padres de Karol Wojtyla lo bautizaron a los pocos días de nacer en la iglesia de Santa María de Wadowice. A los 9 años de edad recibió un duro golpe: el fallecimiento de su madre al dar a luz a una niña que murió antes de nacer. Años más tarde falleció su hermano y en 1941 murió su padre.

De joven, el futuro Pontífice mostró una gran inquietud por el teatro y las artes literarias polacas tan grande que aún en el colegio pensaba seriamente en la posibilidad de continuar estudios de filología y lingüística polaca. Sin embargo, un encuentro con el Cardenal Sapieha durante una visita pastoral, le hizo considerar seriamente la posibilidad de seguir la vocación que tenía impresa -entonces aún sin develarse plenamente- en el corazón: el sacerdocio.

Al desatarse la Segunda Guerra Mundial, los alemanes cerraron todas las universidades de Polonia con el objetivo de invadir no sólo el territorio sino también la cultura polaca. Frente a esta situación, Karol Wojtyla con un grupo de jóvenes organizaron una universidad clandestina en donde estudió filosofía, idiomas y literatura. Poco antes de decidir su ingreso al seminario, el joven Karol tuvo que trabajar arduamente como obrero en una cantera. Según relata el hoy Pontífice, esta experiencia le ayudó a conocer de cerca el cansancio físico, así como la sencillez, sensatez y fervor religioso de los trabajadores y los pobres.
En 1942 ingresó al Departamento Teológico de la Universidad Jaguelloniana. Durante estos años tuvo que vivir oculto, junto con otros seminaristas, quienes fueron acogidos por el Cardenal de Cracovia.

El 1 de noviembre de 1946, a la edad de 26 años, Karol Wojtyla fue ordenado sacerdote en el Seminario Mayor de Cracovia y celebró su primera misa en la Cripta de San Leonardo en la Catedral de Wavel. Al poco tiempo obtuvo la licenciatura de Teología en la Universidad Pontificia de Roma Angelicum y más adelante se doctoró en Filosofía. Durante algún tiempo se desempeñó como profesor de Ética en la Universidad Católica de Dublin y en la Universidad Estatal de Cracovia, donde interactuó con importantes representantes del pensamiento católico polaco, especialmente de la vertiente conocida como "tomismo lublinense".
El 23 de setiembre de 1958 fue consagrado Obispo Auxiliar del Administrador Apostólico de Cracovia, Monseñor Baziak, convirtiéndose en el miembro más joven del episcopado polaco. Asistió al Concilio Vaticano II, donde participó activamente, especialmente en las comisiones responsables de elaborar la Constitución Dogmática sobre la Iglesia Lumen Gentium y la Constitución pastoral Gaudium et Spes. Durante estos años, el entonces Obispo Wojtyla combinaba la producción teológica con una intensa labor apostólica, especialmente con los jóvenes, con quienes compartía tanto momentos de reflexión y oración como espacios de distracción y aventura al aire libre.
El 13 de enero de 1964 falleció Monseñor Baziak por lo que el obispo Wojtyla ocupa la sede de Cracovia como titular. Dos años después, el Papa Pablo VI convierte a Cracovia en Arquidiócesis. Durante su labor como Arzobispo, el futuro Papa se caracterizó por la integración de los laicos en las tareas pastorales, la promoción del apostolado juvenil y vocacional, la construcción de templos a pesar de la fuerte oposición del régimen comunista, la promoción humana y formación religiosa de los obreros y el aliento del pensamiento y las publicaciones católicas.
En junio de 1967, a los 47 años de edad, el Arzobispo Wojtyla fue creado Cardenal por el Papa Pablo VI. En 1974, el nuevo Purpurado ordenó a 43 nuevos presbíteros, en la ordenación sacerdotal más numerosa desde que terminó la Segunda Guerra Mundial.
En 1978 muere Pablo VI y es elegido nuevo Papa el Patriarca de Venecia, Cardenal Albino Luciani, de 65 años, quien tomó el nombre de Juan Pablo I. El "Papa de la Sonrisa", sin embargo, fallece a los 33 días de su nombramiento. El 16 de octubre de 1978, luego de un nuevo Cónclave, el Cardenal polaco Karol Wojtyla es elegido como el sucesor de San Pedro, rompiendo con la tradición de más de 400 años de elegir Papas de origen italiano. El 22 de octubre de 1978 fue investido como Sumo Pontífice asumiendo el nombre de Juan Pablo II.


BIOGRAFIA OFICIALKarol Józef Wojtyła, conocido como Juan Pablo II desde su elección al papado en octubre de 1978, nació en Wadowice, una pequeña ciudad a 50 kms. de Cracovia, el 18 de mayo de 1920.

Era el más pequeño de los tres hijos de Karol Wojtyła y Emilia Kaczorowska. Su madre falleció en 1929. Su hermano mayor Edmund (médico) murió en 1932 y su padre (suboficial del ejército) en 1941. Su hermana Olga murió antes de que naciera él.Fue bautizado por el sacerdote Franciszek Zak el 20 de junio de 1920 en la Iglesia parroquial de Wadowice; a los 9 años hizo la Primera Comunión, y a los 18 recibió la Confirmación. Terminados los estudios de enseñanza media en la escuela Marcin Wadowita de Wadowice, se matriculó en 1938 en la Universidad Jagellónica de Cracovia y en una escuela de teatro.Cuando las fuerzas de ocupación nazi cerraron la Universidad, en 1939, el joven Karol tuvo que trabajar en una cantera y luego en una fábrica química (Solvay), para ganarse la vida y evitar la deportación a Alemania.A partir de 1942, al sentir la vocación al sacerdocio, siguió las clases de formación del seminario clandestino de Cracovia, dirigido por el Arzobispo de Cracovia, Cardenal Adam Stefan Sapieha. Al mismo tiempo, fue uno de los promotores del "Teatro Rapsódico", también clandestino.Tras la segunda guerra mundial, continuó sus estudios en el seminario mayor de Cracovia, nuevamente abierto, y en la Facultad de Teología de la Universidad Jagellónica, hasta su ordenación sacerdotal en Cracovia el 1 de noviembre de 1946 de manos del Arzobispo Sapieha.Seguidamente fue enviado a Roma, donde, bajo la dirección del dominico francés Garrigou-Lagrange, se doctoró en 1948 en teología, con una tesis sobre el tema de la fe en las obras de San Juan de la Cruz (Doctrina de fide apud Sanctum Ioannem a Cruce). En aquel período aprovechó sus vacaciones para ejercer el ministerio pastoral entre los emigrantes polacos de Francia, Bélgica y Holanda.En 1948 volvió a Polonia, y fue vicario en diversas parroquias de Cracovia y capellán de los universitarios hasta 1951, cuando reanudó sus estudios filosóficos y teológicos. En 1953 presentó en la Universidad Católica de Lublin una tesis titulada "Valoración de la posibilidad de fundar una ética católica sobre la base del sistema ético de Max Scheler". Después pasó a ser profesor de Teología Moral y Etica Social en el seminario mayor de Cracovia y en la facultad de Teología de Lublin.El 4 de julio de 1958 fue nombrado por Pío XII Obispo titular de Olmi y Auxiliar de Cracovia. Recibió la ordenación episcopal el 28 de septiembre de 1958 en la catedral del Wawel (Cracovia), de manos del Arzobispo Eugeniusz Baziak.El 13 de enero de 1964 fue nombrado Arzobispo de Cracovia por Pablo VI, quien le hizo cardenal el 26 de junio de 1967, con el título de San Cesareo en Palatio, Diaconía elevada pro illa vice a título presbiteral.Además de participar en el Concilio Vaticano II (1962-1965), con una contribución importante en la elaboración de la constitución Gaudium et spes, el Cardenal Wojtyła tomó parte en las cinco asambleas del Sínodo de los Obispos anteriores a su pontificado.Los cardenales reunidos en Cónclave le eligieron Papa el 16 de octubre de 1978. Tomó el nombre de Juan Pablo II y el 22 de octubre comenzó solemnemente su ministerio petrino como 263 sucesor del Apóstol Pedro. Su pontificado ha sido uno de los más largos de la historia de la Iglesia y ha durado casi 27 años.Juan Pablo II ejerció su ministerio petrino con incansable espíritu misionero, dedicando todas sus energías, movido por la "sollicitudo omnium Ecclesiarum" y por la caridad abierta a toda la humanidad. Realizó 104 viajes apostólicos fuera de Italia, y 146 por el interior de este país. Además, como Obispo de Roma, visitó 317 de las 333 parroquias romanas.Más que todos sus predecesores se encontró con el pueblo de Dios y con los responsables de las naciones: más de 17.600.000 peregrinos participaron en las 1166 Audiencias Generales que se celebran los miércoles. Ese numero no incluye las otras audiencias especiales y las ceremonias religiosas [más de 8 millones de peregrinos durante el Gran Jubileo del año 2000] y los millones de fieles que el Papa encontró durante las visitas pastorales efectuadas en Italia y en el resto del mundo. Hay que recordar también las numerosas personalidades de gobierno con las que se entrevistó durante las 38 visitas oficiales y las 738 audiencias o encuentros con jefes de Estado y 246 audiencias y encuentros con Primeros Ministros.Su amor a los jóvenes le impulsó a iniciar en 1985 las Jornadas Mundiales de la Juventud. En las 19 ediciones de la JMJ celebradas a lo largo de su pontificado se reunieron millones de jóvenes de todo el mundo. Además, su atención hacia la familia se puso de manifiesto con los encuentros mundiales de las familias, inaugurados por él en 1994.Juan Pablo II promovió el diálogo con los judíos y con los representantes de las demás religiones, convocándolos en varias ocasiones a encuentros de oración por la paz, especialmente en Asís.Bajo su guía, la Iglesia se acercó al tercer milenio y celebró el Gran Jubileo del año 2000, según las líneas indicadas por él en la carta apostólica Tertio millennio adveniente; y se asomó después a la nueva época, recibiendo sus indicaciones en la carta apostólica Novo millennio ineunte, en la que mostraba a los fieles el camino del tiempo futuro. Con el Año de la Redención, el Año Mariano y el Año de la Eucaristía, promovió la renovación espiritual de la Iglesia. Realizó numerosas canonizaciones y beatificaciones para mostrar innumerables ejemplos de santidad de hoy, que sirvieran de estímulo a los hombres de nuestro tiempo: celebró 147 ceremonias de beatificación -en las que proclamó 1338 beatos- y 51 canonizaciones, con un total de 482 santos. Proclamó a santa Teresa del Niño Jesús Doctora de la Iglesia.Amplió notablemente el Colegio cardenalicio, creando 231 cardenales (más uno "in pectore", cuyo nombre no se hizo público antes de su muerte) en 9 consistorios. Además, convocó 6 reuniones plenarias del colegio cardenalicio.Presidió 15 Asambleas del Sínodo de los obispos: 6 generales ordinarias (1980, 1983, 1987, 1990, 1994 y 2001), 1 general extraordinaria (1985) y 8 especiales (1980, 1991, 1994, 1995, 1997, 1998 (2) y 1999). Entre sus documentos principales se incluyen: 14 Encíclicas, 15 Exhortaciones apostólicas, 11 Constituciones apostólicas y 45 Cartas apostólicas. Promulgó el Catecismo de la Iglesia Católica, a la luz de la Revelación, autorizadamente interpretada por el Concilio Vaticano II. Reformó el Código de Derecho Canónico y el Código de Cánones de las Iglesias Orientales; y reorganizó la Curia Romana.Publicó también cinco libros como doctor privado: "Cruzando el umbral de la esperanza" (octubre de 1994);"Don y misterio: en el quincuagésimo aniversario de mi ordenación sacerdotal" (noviembre de 1996); "Tríptico romano - Meditaciones", libro de poesías (marzo de 2003); “¡Levantaos! ¡Vamos!” (mayo de 2004) y “Memoria e identidad” (febrero de 2005).Juan Pablo II falleció el 2 de abril de 2005, a las 21.37, mientras concluía el sábado, y ya habíamos entrado en la octava de Pascua y domingo de la Misericordia Divina.Desde aquella noche hasta el 8 de abril, día en que se celebraron las exequias del difunto pontífice, más de tres millones de peregrinos rindieron homenaje a Juan Pablo II, haciendo incluso 24 horas de cola para poder acceder a la basílica de San Pedro.El 28 de abril, el Santo Padre Benedicto XVI dispensó del tiempo de cinco años de espera tras la muerte para iniciar la causa de beatificación y canonización de Juan Pablo II. La causa la abrió oficialmente el cardenal Camillo Ruini, vicario general para la diócesis de Roma, el 28 de junio de 2005.





Peregrino de la Paz



Por encima de credos, religiones e ideologías, Juan Pablo II encarnó más y mejor que nadie la lucha por la paz. Pontífice significa, etimológicamente, el que tiende puentes y, en esta tarea, brilló como nadie el Papa Wojtyla desde que llegó al solio pontificio hace 25 años. De hecho, medios de comunicación y líderes políticos y religiosos de todo el mundo le reconocían abiertamente su bien ganado prestigio como hombre de paz, pacífico e incluso pacifista.
Por defender la paz y las vías de diálogo para resolver los conflictos, el Papa no dudó en enfrentarse a los grandes de turno de este mundo. Primero, le plantó cara durante la Guerra del Golfo al entonces presidente de Estados Unidos, Bush padre. Y después hizo lo mismo con Bush hijo en la guerra de Irak. Siempre de la boca del profeta de la paz salían proclamas pacifistas: «La guerra es el peor de todos los males»; «primado del amor sobre el odio»; «los artífices de la guerra tendrán que dar cuentas ante Dios y ante la Historia»; «la guerra es Satanás»; «la guerra nunca más».
El 'no a la guerra' papal ha ido indisolublemente unido al ecumenismo. El Papa de la paz fue también el Papa de Asís, donde se reunió en varias ocasiones con los líderes de todas las confesiones religiosas. Convencido de que, en contra de lo que dice la historia y sostienen muchos pensadores, las religiones son «fuentes de paz, concordia y libertad», el Papa Wojtyla siempre apostó por el diálogo entre todas las confesiones religiosas de la Tierra. Primero, en el seno del cristianismo. Siempre fue partidario del «que todos fueran uno» de Jesucristo y siempre clamó que la «desunión» es el «mayor escándalo» de los cristianos. Fueron evidentes sus acercamientos a protestantes y ortodoxos, aunque no fue capaz de derribar el 'muro de Moscú', uno de los sueños que no pudo cumplir.
En segundo lugar, su afán ecuménico se centró especialmente en las otras dos religiones del Libro (judaísmo e islamismo). Todavía se recuerda en Jerusalén su oración ante el Muro de las Lamentaciones y el papelito que depositó en una de las ranuras de las piedras del mismo pidiendo perdón al pueblo judío. Pero quizás, con la religión con la que extremó los detalles y vínculos fue con el islam. Karol Wojtyla fue el primer Papa de la Historia en entrar en una mezquita, la de Damasco, en recibir a ayatolás e imames en el Vaticano y en utilizar cualquier foro para oponerse con todas sus fuerzas al choque de civilizaciones y a la confrontación islamo-cristiana. No en vano, le llamaban también el 'Papa del Corán'.
Su infatigable defensa de la paz reforzó su autoridad moral, ya previamente sin parangón ante gran parte de la opinión pública católica y no católica, convirtiéndose en el indiscutible líder espiritual del mundo. Tanto fue así que la propia Izquierda Unida, que no destaca precisamente por ser papista, presentó una proposición no de ley en el Congreso, en la que reclamaba al Gobierno que iniciase el procedimiento para la concesión de la Gran Cruz de Isabel la Católica al Papa por su «enérgica condena de la guerra de Irak». Y la formación política izquierdista añadía: «Sus deseos de paz, sus oraciones buscando una solución pacífica a los jefes de Gobierno de España, Reino Unido y Estados Unidos han representado un punto de referencia para los ciudadanos de toda la Tierra».
Y es que el Papa Wojtyla vivió en su propia carne los horrores de la guerra. «Yo sobreviví a la Segunda Guerra Mundial y por ello debo decir nunca más a la guerra», proclamaba justo antes de iniciarse la guerra de Irak. Por convencimiento y por experiencia, Juan Pablo fue el Papa de la paz.



MÉXICO.- Uno de sus primeros viajes como Pontífice fue a este país, en 1979. Mostró sus discrepancias con la Teología de la Liberación, que aquellos años alcanzaba su máxima aceptación en Latinoamérica. El Papa manifestó en Ciudad de México, Guadalupe, Puebla y Guadalajara, ante enormes masas de gente sin recursos, su desacuerdo con la solución de la lucha revolucionaria, que muchos sacerdotes de Iberoamérica apoyaban. La imagen pertenece a un viaje más reciente a este mismo país.
¡Descanze en paz Nuestro Papa peregrino!
SE HA LLEVADO NUESTRO CORAZÓN.